Detrás de las Costuras
Nos dedicamos con esmero a la manufactura de botas de cuero de primera calidad. Nuestro compromiso con la excelencia se refleja en la procedencia de nuestros cueros, los cuales provienen de prestigiosas curtiembres de Argentina, reconocidas por su artesanía y tradición en el tratamiento de pieles. Utilizamos exclusivamente cueros curtidos de origen vegetal, respetando así las técnicas más auténticas y sostenibles.
Lo que nos distingue, además de la calidad, es nuestra capacidad de diseño. Ofrecemos una amplia variedad de colores, texturas, grabados y teñidos que permiten a nuestros clientes personalizar sus botas de cuero según sus preferencias. Cada par de botas que producimos es una obra de arte en sí misma, creada con un nivel excepcional de atención al detalle y pericia artesanal.
¿Por qué los productos de cuero destacan por su durabilidad? Esto se debe a la estructura fibrosa y flexible que reviste la piel de los animales. Esta característica única proporciona al cuero una resistencia excepcional y una flexibilidad que lo hace ideal para prendas de uso cotidiano. Entre las variedades de cuero, el cuero de vaca es ampliamente reconocido por su versatilidad y calidad, lo que lo convierte en la elección preferida para proyectos creativos como el nuestro.
Las pieles que utilizamos adquieren singularidades únicas debido a la rica vegetación de Argentina. Los campos de nuestro país, con sus praderas, hierbas y árboles, así como el clima boscoso de la Patagonia, son la fuente de alimento principal del ganado que pasta en libertad. Esta alimentación natural contribuye a la calidad excepcional del cuero que utilizamos en cada una de nuestras botas, asegurando que nuestros productos reflejen la belleza y la esencia de la tierra argentina en cada paso que das.
Fabricación
El proceso de fabricación comienza con la creación de nuestros diseños mediante figurin, es la parte más creativa del proceso, él génesis de todo lo que sigue. Luego pasamos a la moldería, adaptada a la horma seleccionada. Una vez que el molde se ha elaborado con las características específicas según el diseño, procedemos a marcar el cuero con precisión y a cortarlo manualmente. Utilizamos una máquina troqueladora para cortar las suelas en diferentes tamaños.
Luego, se inicia el proceso de bordado mediante una máquina de bordado industrial, trabajando con lotes de una docena a la vez para garantizar una calidad uniforme. El siguiente paso es el aparado de las piezas para luego dar forma a la caña utilizando una máquina a vapor y conformar la capellada. Posteriormente pasamos al armado de la bota y por último al ensuelado, se clava el taco y se cose la vira. Realizamos el lustrado y grabamos la marca en la suela.
Este minucioso proceso de fabricación garantiza la calidad y durabilidad de nuestras botas.
Anatomía de una bota texana